Hubo concierto. Anoche Alejandro Sanz se comportó como todo un caballero, y Valencia, como su dama enamorada, se rindió a los pies del astro español, quien cerca de las 9:30 de la noche subió al imponente escenario dispuesto en el Polideportivo Misael Delgado para ofrecer el segundo de los tres conciertos con los que cerrará su gira mundial, “Paraíso Express”.
El madrileño no se detuvo en elogios para la capital carabobeña, sus mujeres y los majestuosos paisajes naturales de esta tierra, que no dudo en bautizar como “Bellezuela”. Peter Punk fue el tema elegido para iniciar el concierto, magistralmente enmarcado con un escenario con efectos de iluminación tridimensional, dos hermosas coristas y un multirracial equipo musical.
No se cansó de alabar a “Valencia”, de juguetear con el público como si fuesen una pareja, de asegurar que no bailaba “para nada” y de sonreír como sólo un artista lo hace frente a un público que lo extrañaba y que, finalmente, lo pudo disfrutar en vivo.
Entonó éxitos tan inolvidables como “Desde cuando”, Nuestro amor será leyenda”, “Corazón partío” y “Cuando nadie me ve” y aunque el público lucía apático a ratos, las letras de “No es lo mismo” o “Looking for paradise” pusieron a todos de pie y eufóricos.
El regalo más especial de la noche fue la aparición en tarima de la agrupación marabina y reciente ganadora de un Grammy Latino, Voz Veis, quienes lo acompañaron en el tema “la Fuerza del corazón”. “Déjenme darle un abrazo maracucho a este hombre”, dijo uno de los integrantes del sexteto, quienes tuvieron esta importante oportunidad en su carrera, justo cuando se celebraba el día de la Virgen de la Chiquinquirá, Patrona del Zulia.
Las amenazas de Alejandro de que el concierto ya estaba por terminar lo amilanaron el ánimo de los valencianos, quienes fieles a su ídolo lo acompañaron hasta el final con otros cuatro temas que no les revelaremos en estas líneas, para que quienes no hayan tenido la oportunidad de hacerlo en estas dos primeras presentaciones, se animen a seguirlo hasta Caracas. Pero si tampoco puede, no se preocupe, prometió que este será uno de los tantos viajes que espera hacer a este “Bellezuela”, cuyos habitantes ya saldaron su deuda.
